Actualmente sin pareja, el considerado como uno de los mejores magos del mundo, está abierto al amor, «siempre y cuando encuentre a alguien que me haga desconectar de la magia y mis dos hijos, para mí, lo más importante”, nos confiesa.
El mago Yunke ostenta el título de mejor mago del mundo. Nos citamos con Salvador Vicent, su verdadero nombre, en el hotel InterContinental de Madrid, el que fuera el primer hogar de Ava Gardner en la capital española.
Sin duda, el mejor sitio para que Salva nos hable de su espectáculo, ‘Hangar 52 Revolution’, que podrá verse en IFEMA Madrid hasta el próximo 9 de enero. Aunque muchos le conocen por sus colaboraciones en ‘El Hormiguero’ de Pablo Motos, no podemos olvidar que estamos ante el mejor mago del mundo, título que ostenta en la actualidad. «Soy un tío muy familiar y nunca olvido mis raíces» Salvador, ¿por qué elegiste ‘Yunke’ como nombre artístico? Mi abuelo era herrero y trabajaba sobre un yunque que mi madre conservó en la entrada de mi casa. Cuando mis amigos conocieron la historia, comenzaron a decir «vamos a casa de Yunke». Más que un nombre, para mí es todo un símbolo y lo llevo con mucho orgullo. Soy un tío muy familiar y nunca olvido mis raíces.
Sin duda, el mejor sitio para que Salva nos hable de su espectáculo, ‘Hangar 52 Revolution’, que podrá verse en IFEMA Madrid hasta el próximo 9 de enero. Aunque muchos le conocen por sus colaboraciones en ‘El Hormiguero’ de Pablo Motos, no podemos olvidar que estamos ante el mejor mago del mundo, título que ostenta en la actualidad. «Soy un tío muy familiar y nunca olvido mis raíces» Salvador, ¿por qué elegiste ‘Yunke’ como nombre artístico? Mi abuelo era herrero y trabajaba sobre un yunque que mi madre conservó en la entrada de mi casa. Cuando mis amigos conocieron la historia, comenzaron a decir «vamos a casa de Yunke». Más que un nombre, para mí es todo un símbolo y lo llevo con mucho orgullo. Soy un tío muy familiar y nunca olvido mis raíces.
¿Siempre quisiste ser mago?
Sí, desde muy pequeño. Cuando tenía 7 años me hicieron un efecto de magia que me gustó muchísimo. Eran unos puntos que aparecían y desaparecían de unos palillos de madera. Me impactó tanto, que empecé a buscar gente que pudiera ensañarme trucos de magia. Ahí empezó todo.
